LOS, IN DE NOSOTROS

Queridos hijos; hoy analizaré los varios “in” que adornan a una buena parte de nuestra sociedad, como por ejemplo: inconsciente. Según mi pequeño Larousse ilustrado, (para que los seguidores de Feinman no se devanen los sesos, es un diccionario) tiene varios significados, a saber; irresponsable, irreflexivo, necio atolondrado. En este grupo podemos identificar especialmente a los chóferes (del vehículo que sea) que incumplen las leyes de transito, especialmente en las ciudades; no respetando la luz roja en los semáforos, ni a los peatones que cruzan correctamente en una esquina. Estacionan donde no está permitido, especialmente en las veredas. No usan el cinturón (el de castidad hace tiempo que tampoco lo usan las mujeres) y en calles y avenidas, (salvo algún marciano) todos transitan a velocidades mayores a las permitidas. El resultado de esta inconsciencia en Argentina, arroja la escalofriante cifra de más de 10 mil muertes al año, lo que equivale a 28 vidas perdidas por día, cifra muy similar a los que mueren en Irak en la innegable guerra civil producida por el incompetente de Bush. Este ultimo in según Larousse, significa; Incapaz, inepto, ineficaz, torpe ,nulo e ignorante, o sea, un Feinman completo, aunque Bush además es pinochetista, por el placer que siente de robar y asesinar inocentes. Otro in muy arraigado entre nosotros los sudacas, es el de incorrecto, cuyo significado es: inexacto, errado, equivocado y desacertado. Como el más claro ejemplo, podemos remitirnos a la lucha del gobierno contra la inflación y sus criticas al sector ganadero por el alza del precio de la carne, culpando a estos por pretender traspasar al consumidor interno el mismo precio que se obtiene con la carne de exportación, en circunstancias que el productor agropecuario no es el que produce y exporta. A la mayoría de ellos solo les da el cuero para producir; los exportadores son las transnacionales, como Cargill, Bunge, Suifwt entre otros, los que asociados a la banca internacional tienen prácticamente el monopolio del comercio exterior. Son estos sectores los que imponen los precios internacionales, el resto lo hacen los intermediarios internos, entre el ganadero, los frigoríficos y los carniceros, que con esa tradicional viveza criolla no desaprovechan ninguna oportunidad que les permita incrementar mas allá de lo razonable sus utilidades. Es en estos eslabones de la cadena donde hay que poner “toda la carne en el asador” para evitar que sigan haciendo lo que se les antoje con los bolsillos del consumidor. Son ellos los que despiertan en el resto de los empresarios, la mentalidad del “porsiacaso” abriendo el apetito al resto a plegarse a la lucha inflacionaria, que es, ha sido y será, la mejor arma para desprestigiar a un presidente que les dificulta su voracidad. Lo hicieron en Chile con Salvador Allende y lo hicieron con Alfonsin acá en Argentina; no lo hicieron con Menem porque este les dejó que hicieran lo que quisieran. Y ven en Kirchner el peligro de que este termine con las facilidades que aquel les regalara; ya recupero el Correo Argentino en manos del grupo Macri que nunca pago el alquiler comprometido por la concesión.( y Mauricio, el hijo de tigre pretende que lo elijan presidente) Le rescindió el contrato por el espacio radioeléctrico a una empresa francesa que reconoció haberle pagado al Gobierno de Menem una coima de 25 millones de dólares y por la cual ellos obtuvieron 300 millones de utilidad porque jamás pagaron ningún canon al país. Últimamente también le rescindió el contrato a la Firma Suez concesionaria de Aguas Argentina. No ha permitido el aumento a las tarifas de los usuarios domiciliarios del Gas, Electricidad, Agua, y Teléfonos. Desoyendo reiteradamente las instrucciones del FMI pidiendo el aumento de estas, lo mismo que las exigencias para que le pague a los fondos buitres los bonos que estos no aceptaron negociar en el canje de la deuda en Default. Creo que con lo expuesto, sobran los motivos para que el poder de las transnacionales quieran imponer con sus armas de persuasión económicas, el sometimiento de este díscolo presidente sudaca. Y está en manos de esta sociedad, (salvo los de la derecha económica) el impedir que lo terminen desestabilizando y obligarlo a cambiar o hacerlo que se vaya anticipadamente. ¿En que forma se preguntaran ustedes? pues no comprando los productos a los cuales le suban el precio. No seamos ingenuos. Buenos Aires 06/04/06 Milan Bonacic-Doric Hasta la próxima Baybis